miércoles, 12 de septiembre de 2007

Justos y justos




“Por tanto, os digo que si vuestra justicia no fuera mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis al reino de los cielos.”

Mateo 5: 20


En un mundo en el que cada quien puede tener su propia opinión de lo que es correcto, nada ofende más a la opinión pública que un hombre buscando la verdadera virtud. Según los valores trastocados del mundo aspirar a una justicia mayor es un acto de arrogancia; pretender amar como Cristo, una actitud estúpida y poco práctica; y la fe en Dios, una comprobación de locura e ignorancia.

Desde la perspectiva del Evangelio, aspirar a alcanzar una justicia mayor que la del mero ritualismo, de la simple hipócrita apariencia, de la simple aspiración de fama, es una cuestión de vida o muerte.









1 comentario:

Roxana_Otiniano dijo...

Tienes toda la razón, los que quieren seguir la verdadera justicia según Jesucristo, son tratados como tontos o "poco profesionales" y esto puede crear un poco de tristeza, pero el volver a la palabra de Dios, trae nuevamente la paz y el gozo que El promete, porque allí está el manantial de la Vida Abundante.

googlea0c051ee0262d0f6.html