lunes, 29 de octubre de 2007

¿DE DÓNDE VENDRÁ MI SOCORRO? (Salmo 121)




¿Alguna vez te has encontrado tan desesperado ante una situación sin saber que hacer?



Muchas cosas en este mundo pueden atormentar no solo a los jóvenes sino a todas las personas a lo largo de sus vidas. Un ejemplo de ello puede ser el no encontrar trabajo siendo un recién egresado. Por el otro lado podemos mencionar también lo esclavizante que puede ser el trabajo acortando por completo tu tiempo en familia. Otro ejemplo puede ser tu semana de exámenes en un centro de estudios (1º capítulos para leer de un día para el otro) y sobre ello tus problemas interpersonales. ¿No es eso estresante? Llega el fin de semana y sólo quieres dormir y no despertar.




Pues te animo a despertar y no sólo en esas circunstancias sino en cualquiera que te encuentres. Ya que “Jehová es tu guardador, Jehová es tu sombra a tu mano derecha. El sol no te fatigará de día ni la luna de noche” Salmo 121: 5-6. No hay otro remedio más eficaz que Cristo. Cuando pases por una circunstancia adversa tan sólo levanta la mirada y recuerda: “Mi socorro viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra” Salmo 121: 2.




Dios en su bondad tan grande nos va a preservar de todo mal. Desde las cosas más grandes hasta las pequeñas podremos disfrutar de su compañía y protección dónde quiera que vayamos porque “Dulce amigo nos es Cristo. Mis pecados Él limpio y me cuida con cariño…” ¡Ya no nos frustremos al no saber que hacer ante una situación. Sólo digamos: “Padre, aquí estoy. Tan sólo has tu voluntad en mí”. Si lo hacemos así, poco a poco podremos ver su amor y misericordia reflejada en todas las cosas que hacemos. Claro que para ello debemos reconocer que Él es nuestro único guardador ya que “Jehová te guardará de todo mal, él guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre.




Bueno pues, ahí tienes la formula y es infalible. ¿Ya la estás usando?









sábado, 20 de octubre de 2007

Donde no hay direccion sabia caera el pueblo. Mas en la multitud de consejeros hay seguridad Prov. 11:14



Es increíble lo útil que pueden ser unas palabras de aliento o consejo de parte de las personas mayores. Aquí solo me queda afirmar lo sabias que son y lo dispuestas que están a instruir a los mas jóvenes carentes de experiencia en absoluto.
Una tarde decidí visitar a mi mamá en su trabajo, sin saber que ese mismo día era el cumpleaños de su jefa. Por tal motivo, iba a salir temprano porque tenía una reunión con las damas de la iglesia. ¡Iban a celebrar con la cumpleañera! Estaba decidida a irme pero me invitaron. No sé que sucedió en ese momento pero acepté. No estaba convencida del todo ya que para mi estar con “viejas” era muy aburrido. Pero igual fui, sin saber todo lo que me esperaba.

Bueno, llegamos al lugar del encuentro y saludé a todas las hermanas una por una. A medida que pasaba por sus asientos sentí algo jamás percibido: “Un profundo amor y preocupación por mí”. Pues cada una de ellas me procuraba de los mejores y más variados consejos, sabían que algo me sucedía pero jamás se atrevieron a preguntarme por temor a sonar muy aburridas con un “sermón de viejas”. Fue por ello que aprovecharon tal situación para cambiar por completo mi perspectiva acerca de ellas. Hasta la hermana que me caía peor me abrazó con tanto cariño y me dijo: “Te quiero mucho linda muchachita”. Lo hizo mostrando tanto amor que hice muchos esfuerzos para no dejar caer las lágrimas. En fin, durante nuestra tertulia, todas ellas contaban historias súper interesantes y útiles para mi vida; todas, llenas de consejos y dispuestas a ayudar a la “joven inexperta”.


Gracias Señor por abrir mis ojos y haber puesto en mi camino a personas tan sabias. Gracias también porque me permitiste tener comunión con ellas y darme cuenta lo valiosas que son. No sólo por ser hijas tuyas sino por velar por los más jóvenes también. Lo único que deseo en este día es que me perdones por haber puesto tantos prejuicios ante personas que me aman en verdad. Ahora las valoro más que nunca y ojala más jóvenes tuvieran la oportunidad que yo tuve.



viernes, 19 de octubre de 2007

ASÍ QUE, EL QUE PIENSA ESTAR FIRME, MIRE QUE NO CAIGA (1 Cor. 10:12)

Una mañana, no hubo clase en el jardín donde dicto por lo que decidí aprovechar mi tiempo e ir a la universidad con el fin de tomarme una foto para mi carné de medio pasaje de este año. Mientras hacía la cola, recordé que traía en la mochila mi MP3 (al cual había ignorado cerca de un mes a causa de mi “falta de tiempo”) entonces, lo prendí y la primera canción que escuché decía así: “Nunca te olvides de donde Dios te ha sacado. No vaya a ser que más adelante caigas por no haberte cuidado”.

Fue exactamente en ese momento en el que me di cuenta que aquello me había pasado. No pretendo aburrir dando un testimonio largo o cosas así, esto es sólo un recordar mis orígenes antes de conocer a Cristo. Jamás fui una drogadicta, rebelde sin causa o resentida social. Todo lo contrario, nací en un hogar cristiano con todas las historias y parábolas de memoria. Luego de aceptar a Cristo a los 17, fui normal en mi crecimiento espiritual. Pero fue a partir de este año que puedo sentir más que nunca el amor de Cristo en mí y su voluntad reflejada en cada una de las cosas que hacía.

Fue ahí que no sólo yo noté el cambio sino también los demás y cuando ellos me decían“¡Cuánto estás creciendo espiritualmente!”, yo agachaba la cabeza y decía “Yo también lo siento”. Poco a poco se envaneció mi corazón y me alejé. Me sentía tan perfecta que ninguna prueba podría tocarme y me equivoqué. Me di cuenta que por creerme la fuerte me sobrevinieron una serie de pruebas que yo no pude pasar del todo. Sin embargo, aunque toque fondo de nuevo, Cristo me ayudó a levantarme. “…porque aunque caí, me levantaré; aunque more en tinieblas, Jehová será mi luz” (Mi. 7:8).

Fue bueno darme cuenta de lo que sucedía en mí y sólo quería compartirlo con todos. No sé a quién llegue esto pero espero les sirva a no confiarse en sus propias fuerzas sino solo en Dios. Es bueno también estar de vuelta y saber que Cristo nos espera con los brazos abiertos, dispuesto a curar todos nuestros rasguños.



“Y cuando aún estaba lejos lo vio su padre y corrió, se echó sobre su cuello y le besó” (Lucas 15: 20)



“Te voy a extrañar harto”. Decido comenzar con esta frase por que fue exactamente eso lo que una niña de cuatro años me dijo al enterarse que no iría a dictar clase a su salón por dos días seguidos. Como pocas personas saben, soy profesora eventual en un jardín y a pesar de que recién llevo un mes, siento como si ese fuese mi lugar.

Tal situación me hizo pensar mucho, ya que al escuchar la sentencia de aquella niña, medité en como se sentiría Jesús al ver a uno de sus hijos alejarse. Dios nos dio libre albedrío, es por eso que podemos hacer lo que mejor nos parezca, sea bueno o malo, ya sea que nos vayamos de su lado por un tiempo, a Jesús solo le queda por decir “Te voy a extrañar harto”. Él puede aconsejarnos y decirnos que es lo mejor para nosotros pero si aún así decidimos separarnos de él, no nos puede obligar a quedarnos. Que triste debe ser para Dios, el hecho de ver que uno de sus hijos se aleja del hogar - a pesar que sabe que tarde o temprano volverá – es muy doloroso el vernos sufrir siguiendo caminos que para nosotros son buenos pero cuyos finales son de muerte.

Aquella niña tenía la plena seguridad de mi regreso y aún diciendo lo que fuere yo no me iba a quedar con ella. Por tal razón, sólo le quedó despedirse y esperar mi regreso ya que no podía retenerme más con ella.Lo mismo sucede con Jesús, con inmenso dolor espera nuestro regreso ya que no puede hacer más por retenernos a su lado y aunque luego terminemos sufriendo, nos deja ir. Sin embargo, cuando volvemos, nos recibe con los brazos abiertos y ¡Hasta hace fiesta! ¿Nos es misericordioso nuestro Dios? ¿No lo hace eso digno de toda nuestra alabanza y amor?




CÓMO LEÓN RUGIENTE… (1 Pedro 5:8)…O ¿TALVÉS LOBO?



¿Alguna vez han analizado a cabalidad el cuento de la Caperucita Roja? Tal situación en la que el lobo se acerca a la niña “inocente” y le pregunta ¿Dónde vas? Y ella responde: ¡A la casa de mi abuelita! Pues a pesar que su mamá le dijo que no hablara con extraños, ella lo hizo. Además, en el momento de estar el lobo disfrazado, ¿Cómo es posible que Caperucita no se de cuenta que la abuelita es el lobo con el que estuvo hablando horas antes? Y sobre todo, que comience a preguntar sobre las orejas, ojos y “se mete en la boca del lobo” preguntando hasta por su boca tan diferente.

Dejémonos pues de tonterías y afirmemos que aquella niña sabía perfectamente lo que hacía y con quién hablaba. Aunque inconscientemente ella no quería ser comida por el lobo. Sin embargo, “sin querer queriendo” le da todas las pistas para que la encuentre y la coma. Se podría decir entonces, que sin quererlo estaba coqueteando con el lobo. Como este tema no es sólo para chicas, me atrevo a preguntarles a todos : ¿Alguna vez se han comportado como Caperucita? Ya que el lobo (Satanás) siempre va a estar rondándonos y disfrazándose de lo más sublime y codiciado para hacernos caer. “…porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar” (1 Pedro 5:8).

Ahora, hay personas que lo hacen inconsciente y otras muy cuerdas de lo que hacen. Pero en ambos casos ellas se equivocaron y ya no quieren ser comidas por el lobo. ¿Cómo salir de todo esto? JESUCRISTO. Hagamos que él sea nuestro único motor, por medio del cual rechazamos toda tentación por más fuerte que sea.

Recordemos esto: “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón. Porque de él mana la vida” (Prov. 4:23). ¿En que caso te encuentras tú?...

martes, 9 de octubre de 2007

Poesía: ¿Qué quiero, mi Jesús?


¿Qué quiero, mi Jesús?...Quiero quererte,
quiero cuanto hay en mí, del todo darte
sin tener más placer que el agradarte,
sin tener más temor que el ofenderte.

Quiero olvidarlo todo y conocerte,
quiero dejarlo todo por buscarte,
quiero perderlo todo por hallarte,
quiero ignorarlo todo por saberte.

Quiero, amable Jesús, abismarme
en ese dulce hueco de tu herida,
y en tus divinas llamas abrasarme.

Quiero, por, fin, en Ti transfigurarme,
morir en mí, para vivir tu vida,
perderme en Ti, Jesús, y no encontrarme.


Autor: Calderón de la Barca





Sábado : 13 de Octubre
El Evangelio Según Jesucristo: “La Parábola de los Terrenos:¿Qué clase de corazón tengo?”
Expositor: Jorge Ugarriza

Este sábado, continuamos con una nueva e interesante secuencias de estudios bíblicos, esta vez se trata de una reflexión acerca del significado de la salvación desde la perspectiva del corazón del hombre. Si entendemos que la vida abundante que Cristo ofrece es más que un “seguro contra incendios” y que es descrita como una fuente de agua viva fluyendo del corazón; creo que llega el momento en que reflexionemos acerca de qué clase de “cristianismo” vivimos hoy.

Si eres de aquellos que no se conforma al simple ritual de la costumbre y la superficialidad de aquellos que quieren “jugar al cristianismo” sin asumir el costo de la sagrada vocación, este estudio puede contestar muchas preguntas.

Te esperamos este sábado a las 7:00 p.m.

Domingo 14 de Octubre
La Vida en EL Espíritu: ¿Resposabilidad de quién?
Expositor: Pável Jáuregui

¿Cómo entender y armonizar la verdad de que la salvación es una obra de Dios y al mismo tiempo una responsabilidad humana?

Este domingo a las 11:00 a.m.




Además, te invitamos a leer nuestros últimos devocionales y videos:

Videos:

Videos Cristianos "No es como yo"

Videos Cristianos "El Milagro"

Devocionales

¿Sólo un poquito?

"TENGO VIDA... TENGO DUEÑO... Y SOY QUERIDO"

EN SU BRAZO PODEMOS PONER NUESTRA ESPERANZA (Is. 51:5)

Victoria y Santidad

¡Examina tus sentimientos e ideas!


viernes, 5 de octubre de 2007

Videos Cristianos "No es como yo"

En el devocional de esta semana, cite algunos versículos de la carta de Pablo a los filipenses, en el capítulo 3 (por recomendación de un gran amigo y hermano) Aquí el apóstol pide a los hermanos que sigan firmes en el camino hasta llegar a ser como Cristo

"...a fin de conocerle, (a Cristo)y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte, si en alguna manera llegase a la resurrección de entre los muertos.
No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús.
Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.
Así que, todos los que somos perfectos, esto mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto también os lo revelará Dios."
Filpenses 3:10-15
Esta semana los invito a escuchar "No es como yo" de Jesús Adrián Romero...




miércoles, 3 de octubre de 2007

¿Sólo un poquito?

"Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo.
Porque nosotros somos la circuncisión, los que en espíritu servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne."
Filipenses 3:2,3
Es increíble cuando piensas.. "no, eso nunca me va a pasar a mí"...y luego darte cuenta que Dios te puede llamar y ponerte en un lugar que hasta hace poco parecía lejano. Pero, parafraseando al tío de Peter Parker, "con un gran poder viene una gran responsabilidad". Cuando Dios te encarga nuevas cosas, aparecerán otras con la intención de hacerte caer..

Ahora, ¿Qué puedo considerar malo? Muchas personas pensamos que hay cosas que sólo son un poquito malas y que en esencia no lo son: películas, canciones, reuniones, etc.

Nuestros argumentos son: pero la letra de canción es fea sólo en esa parte, luego es muy bonita ... Sí, se que ahí se van a comportar mal, pero es sólo un ratito, después la pasaremos tranquilos ... y otras más.

Hace pocas semanas leí una meditación en la que un padre trataba de explicarle esto a sus hijos, ellos sotenían esos argumentos que alguna vez hemos usado...


El padre preparó una riquísima y hermosa torta de chocolate, sus hijos querían comer y el les dijo:

-Adelante, coman toda lo que quieran... la hice con mi receta especial: sólo que añadí un ingrediente extra: 200 gramos de PUPÚ DE PERRO pero el resto tiene los ingredientes mas sabrosos....

Los niños se negaron a comerla y le preguntaron a su padre ¿Por qué le puso eso?

-Mis queridos hijos, es lo mismo que ustedes me dicen SÓLO TIENE UN POQUITO DE PUPÚ DE PERRO... SÓLO UN POQUITO

Debemos alejarnos de ese tipo de cosas, que de alguna u otra manera nos podrían alejar de lo que Dios tiene trazado para nosotros... y nada importa más que seguir a Cristo...
"Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo.
Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo"
Filipenses 3:7,8

¿Quieres un poquito de torta?



googlea0c051ee0262d0f6.html