Un día mi pastor de jóvenes me dijo: "Todas las pruebas por las que pases a lo largo de tu vida serán únicas. Nosotros podemos aconsejarte, estar contigo y orar pero no podemos pasar esta prueba por tí. Eso es algo que debas hacer completamente sola". Meses atras yo solamente agachaba la cabeza al escuchar ésto y de vez en cuando lloraba. Sin embargo, sabía de que por muy difícil que todo pareciese, tarde o temprano yo iba a sacar una enseñanza de todo y me iba a regocijar en el Señor.
Una manana antes de ir al trabajo (justo en aquel mes en el que aprendí muchas cosas) estaba leyendo mi Biblia y llegué a este pasaje de "Jehova preside en el diluvio". Fue ahí que terminé de despertar. ¿Cómo pude vivir todos estos meses pensando pensando que yo sola iba a poder con todo, olvidando que Dios es el único capaz de curar mis heridas? Siempre estuvo tratando de hacerlo pero yo no me dejaba. De una vez por todas deseaba pararse en medio de todos mis problemas y muy a pesar de todo mostrarme el camino de salida. "El siempre quizo acampar alrededor mío y defenderme" Sl. 34:7
EL PROBLEMA ERA YO! Dios estuvo siempre tomándome de la mano y lo estará. Me enseñó que estoy viva y que nada está perdido aún. Pero por sobre todo, me enseñó que solo estando con El podré ver su voluntad para mi vida. Fuera de El nada puede ser y si en alguna prueba sufres, Dios te recogerá y te moldeará. El está diciendote:"Bástate mi gracia porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré en mis debilidades para que repose sobre mí el poder de Cristo" 2Cor. 12:9
Pues es así, mientras estás quebarado cual vasija que cayó al piso, y todos ignoraron que Dios desea recoger todas tus piezas, una por una, las pegará con su infinito amor y misericordia dándote una nueva forma, la forma que más te convenga y la que más le dé gloria.
Parece mentira pero de las cosas malas aprendemos mas y así Dios deja que de vez en cuando caigamos para que en nuestra desesperación podamos volver a El y no olvidar a nuestro Creador. Hay un propósito para Dios, y el suyo es: "Moldearte de tal manera que puedas convertirte en un gran siervo fiel al fianl". Yo, ya aprendí mi lección.
Todos pasaremos por esto algún día, pero cuando lo hagas solo recuerda: "BÁSTATE SU GRACIA".
TE AMO SEÑOR! GRACIAS POR CONSIDERARME TU HIJA! GRACIAS POR PERDONARME Y MOLDEARME. QUIERO SER MAS SEMEJANTE A TI!